Podrá tener mala prensa, pero el chupete,
chupón o como quieran llamarlo es el mejor invento para una madre, además de
los pañales descartables (uf de solo pensar que yo usé pañales de tela me
compadezco de mi madre). Siempre que pienso en estas 2 cosas me apiado de las
madres que no pudieron gozar de estos beneficios.
Imagínense estar parada en el tráfico con tu
bebé en el coche a los gritos locos, y no tener nada que darle para calmarlo,
más que esperar a que se le pase, o morir en el intento. Imagínense esas colas
en el supermercado, o cuando estás en la sala de espera del pediatra, que
sieeeempre está retrasado, y tu bebé llora, y no tienes como lograr calmarlo. Otra
vez, insisto…bendito chupete. De hecho, el nombre en español es asqueroso, y
llama a mil obscenidades…pero los gringos en eso sí que supieron encontrarle el
mejor nombre: pacifier. Eso es! Es lograr
la paz cuando nada parece lograrlo.
Quiero confesar que detesto esas miradas
juiciosas, y ni hablar esos comentarios, cuando le das el chupete a tu bebé, y la
gente (siempre muy desubicada) te dice: “Cuidado, yo no te lo recomiendo, no lo
malacostumbres, no es bueno el chupete”, o sino peor…cuando te dicen “después
va a sufrir cuando se lo tengas que quitar”. Si, va a sufrir, ok, pero como
todo lo que va a tener que aprender, como cuando pase a mi bebé de su moisés a
la cuna, o le quite sus pañales, o su osito preferido se pierda en algún viaje,
todo en la vida tiene un ciclo, y mientras tanto…se goza!
Me acuerdo que en Argentina, había un show de
niños con Carlitos Balá, muchos seguro mientras leen esta línea se sonríen…verdad?
Y este hombre se caracterizaba por tener un chupetómetro, donde los niños íbamos a dejar ahí su chupón para despedirnos. Cuantos padres nos han estafado
y nos han dicho que nuestro chupete ahí descansaba!!! Era como un cementerio de
chupetes, y entonces así te despedías de él, y sabías que allí yacía en paz.
Ahora ya no existe Carlitos Balá, pero
seguramente encontraremos otra forma de dejarlo cuando nos toque. Quiero
confesar que esta vez, no será mi bebé la más afectada, yo voy a estar más triste
de dejar a este verdadero amigo que tantas alegrías me ha traído. Es como
cuando uno decide dejar de fumar o dejar de tomar…perdemos a nuestro gran
compañero, no?
Así que bienvenido a nuestras vidas desde los
primos días querido chupete, gracias por existir!!!